Una tarjeta de crédito puede convertirse en tu mejor aliada si sabes cómo utilizarla y eres responsable con los pagos. Pero también te puedes encontrar con la otra cara de la moneda, un instrumento que te perjudique financieramente si no cuentas con los conocimientos necesarios.
No queremos que continúes usándolas con temor o que aún no tengas una por las malas experiencias de otras personas, es por eso que hoy te hablaremos en detalle acerca de los peligros ocultos de las tarjetas de crédito. Para que comiences a disfrutar de todos los beneficios, los cuales muchas personas ni se imagina existen.
¿Listo para conocer detalles que pueden salvar tu economía personal y hacer que tu vida de un giro importante? ¡Comencemos!
Oportunidades que no puedes dejar pasar
Si por lo general sueles oír que las tarjetas de crédito lo menos que hacen es ayudar a las personas, es el momento de cambiar dicha percepción. Este tipo de opinión es normal en personas que no han sabido utilizar con responsabilidad esta herramienta financiera que sí puede aportar mucho.
Pero la clave para comenzar a visualizar lo bueno, es tener claridad en el funcionamiento y lo qué es en sí una tarjeta de crédito.
Una tarjeta es un instrumento que ofrecen las entidades bancarias para que tengas acceso a una línea de crédito, por lo tanto te presta dinero o visto desde otra perspectiva, son pequeños préstamos.
Pero como ves, es dinero prestado y no un dinero extra que te han dado, lo que implica que tienes que devolverlo todos los meses. De lo contrario comenzarás a pagar de más a través del cobro de intereses, razón por la cual no debes llegar y contratar lo primero que te ofrezcan.
Es fundamental que antes de elegir hayas revisado tu perfil y establecido que cuentas con la capacidad económica para adquirir este compromiso. En otras palabras, que con tu sueldo puedes hacer los pagos sin quedarte en ceros.
Luego es el momento de analizar tus necesidades y lo que buscas hacer con una tarjeta de crédito. Para ir descartando y haciendo que la búsqueda sea más específica, encontrando el producto que realmente te ayudará.
Para finalmente conocer bien las características y beneficios, lo que te hará utilizarla correctamente sin poner en peligro tu salud financiera.
Peligros ocultos de las tarjetas de crédito
Una tarjeta puede ser de gran aporte en tu vida, pero si no cuentas con la información completa pueden ir apareciendo en el camino algunos peligros ocultos, que son los que revisaremos a continuación.
Es un alto porcentaje de la población mexicana que tiene una tarjeta de crédito en su bolsillo, por lo que la circulación en el país es bastante alta. Hoy es de lo más común ver a las personas pagando, por ejemplo, con su tarjeta en el supermercado, donde la realidad es que muchas de estas personas no tienen claro cómo se deben usar.
Pero estos atractivos plásticos esconden algunos riesgos que bien pueden evitarse para aprovechar las muchas ventajas que incluyen.
Los intereses te pueden afectar seriamente
Comenzaremos hablando de los intereses, porque son considerados por los expertos el peligro más latente, lo que puede hacer que termines pagando más del doble del valor de un producto.
Si ya te ha sucedido esto, el culpable son sin duda alguna los intereses que se suelen desconocer.
Aquí un claro ejemplo, una persona que haga una compra por 3 mil pesos y que tome la decisión de devolverlos en tres años terminará pagando más de 900 pesos adicionales por concepto de intereses.
Por lo tanto, ahora puedes ver lo caro que puede ser tener una tarjeta de crédito que no se utilice adecuadamente.
Otro punto que tienes que tener presente, es que los intereses son más elevados que los de un préstamo, pero no dejes de observar que son un mecanismo de financiación cómodo. Ojo, porque los problemas pueden comenzar a aparecer cuando te acostumbras a pagar a crédito incluyendo recibos de tu casa.
Deudas eternas
Otro de los grandes peligros de las tarjetas de crédito son las deudas infinitas, lo que se conoce como sobreendeudamiento. Y por el simple hecho de que contrates esta herramienta ya corres el riesgo de endeudarte.
Peor aún si no devuelves a tiempo el dinero, porque la deuda comenzará a alargarse exageradamente.
De hecho puedes encontrarte con tarjetas que te dan la posibilidad de reembolsar un tanto por ciento de la deuda muy reducido todos los meses. Lo que a primera vista parece muy bueno, pero la realidad es distinta, porque pagar poco termina saliendo muy caro.
Veámoslo nuevamente con un ejemplo, si en vez de devolver 3 mil pesos en tres años tomas la decisión de hacerlo con una cuota mensual fija de 60 pesos, terminarás con la deuda a penas en ocho años pagando alrededor de 2 mil 200 pesos en intereses.
Uso excesivo del pago aplazado
La realidad es que al pagar a plazos puedes perder la noción de cuánto estás pagando y cuánto es lo que debes. Además de terminar financiando compras que ni siquiera necesitas.
Lo más recomendables es que pagues a fin de mes sin intereses, pero para ello tienes que observar que tu presupuesto te lo permite y todo esto lo tienes que analizar previo a la contratación.
Pero si en algún momento te ves en la obligación de pagar a plazos, lo mejor es que elijas una cuota alta, así podrás acabar con la deuda lo antes posible. Y si la compra que quieres hacer es muy elevada, también deberías analizar si lo mejor es solicitar un préstamo, recuerda que cobran menos intereses.
Para ir finalizando, si te tomas el tiempo de investigar las tarjetas que pueden cubrir tus necesidades podrás encontrarte con algunas que cobran intereses bajos o que incluso no los cobran.
Esperamos haya quedado todo claro y que de hoy en adelante evites caer en estos peligros ocultos de las tarjetas de crédito, ¡hasta la próxima!