Para gran parte de la población mexicana el consumo es simplemente comprar algo y satisfacer una necesidad o simplemente un capricho. Pero las compras van más allá, por lo que se pueden encontrar distintas categorías de consumo.
Donde aparecen algunas que de nombre nos parecen un verdadero trabalenguas, pero conforme te vas informando te das cuenta que se trata de tendencias y actitudes que se ven todos los días. Es en este momento donde aparece el consumo conspicuo, el cual a todo el mundo le suena desconocido, pero no te preocupes que te lo explicaremos a continuación.
Además de aprovechar de ofrecerte algunos ejemplos para que te quede muy claro y desde hoy en adelante trates de evitar caer en algunas malas prácticas que solo dañarán tus finanzas personales, ¡comencemos!
El consumo a rasgos generales
Si vamos a hablar de un término que es completamente nuevo para muchas personas lo mejor es comenzar con lo general, en este caso entender de qué se trata el consumo.
El consumo que se traducen en compras de productos y servicios, sucede por una gran variedad de razones, donde pueden existir las más utilizadas que tienen relación con la satisfacción de necesidades básicas como el agua.
Siendo el anterior un ejemplo de los más comunes, en el cual tienes que pagar la factura del agua o bien comprar una botella con agua para calmar la sed. Pero esto se puede llevar a una diversidad de bienes.
Si quieres una respuesta más técnica, el consumo es gastar en un producto o servicio poniendo final al proceso de producción, actuando como uno de los disparadores de la circulación de los capitales en la economía.
El consumo se trata de una actividad que se retroalimenta, generando mayor producción, lo que nos lleva a la conclusión de que el ser humano produce para consumir.
¿Qué es el consumo conspicuo?
Ahora que tienes claro lo que es el consumo a nivel general, es momento de adentrarnos en el consumo conspicuo.
Donde una de las tantas explicaciones para su debida comprensión, es que establece que las personas compran un producto o una marca por la imagen personal que esta genera en los demás.
Si lo queremos ver desde un punto de vista más simple, el consumo conspicuo muestra a otros un estatus elevado, dando la impresión de tener una fortuna en la cuenta bancaria sin ser así. Observando desde otra perspectiva, se trata de una especia de clasismo.
Y a pesar de que el concepto nos parezca completamente nuevo y desconocido se ha originado en el siglo XIX. Siendo descrito en aquel entonces como un consumo de jefe de tribu que lleva accesorios que lo distinguen del resto, dejando en evidencia su posición social.
Una base fundamental de los productos de lujo que son los que adquieren las personas que consumen a través de este concepto, es que son escasos. Por lo tanto, solo un grupo reducido de personas los puede tener.
Conducta de compra
Con las definiciones de consumo conspicuo podemos observar claramente que existen conductas de compra. Donde se ve que lo que predomina es crear una imagen de estatus, pero esto no es todo.
Existen variables como la calidad del producto o lo que se percibe de esta, que es lo que hace se prefieran ciertos productos por sobre otros. Otras marcar serán buscadas por las personas no por tratarse de artículos caros, más bien por las preocupaciones ecológicas, como es el caso de los autos híbridos.
Así como suele ganar el impulso de tener en las manos el último producto tecnológico o vestirse a la moda más reciente.
Ejemplos de consumo conspicuo
Vayamos a ver algunos ejemplos para terminar de dejar claro este tipo de consumo.
Los relojes son uno de los productos más consumidos que generan este consumo, así como tener el último modelo de teléfono celular. La asistencia a restaurantes determinados y clubes también entra en esta categoría de consumo.
La ropa, los autos de lujo, las joyas, los viajes, las motos, los perfumes, eventos, recitales, arte, todos estos productos y servicios forman parte del consumo conspicuo, con lo cual puedes comenzar a evaluar tu conducta.
Recuerda que este tipo de consumo no es positivo y solo puede hacerte llevar al límite tus finanzas personales.
El consumo responsable
Queda en evidencia que el consumo conspicuo no es nada positivo porque no ofrece beneficio alguno, por lo que se considera como un tipo de consumo negativo y muy peligroso, sobre todo para aquellas personas que suelen realizar compras compulsivas.
Si perteneces a este grupo de personas que solo busca aparentar, nuestra recomendación es que comiences a hacer los cambios hacia un consumo responsable.
Este tipo de consumo no solo tiene como objetivo que puedas ser el mejor administrador de tu dinero, además se guía por criterios sociales y medioambientales con el fin de construir un entorno favorable que impacte lo menos posible al medio ambiente.
Por lo que, los excesos en compras se convierten en un menor consumo y que aquello que adquieras sea lo más solidario y sostenible posible.
En definitiva, cada vez que te invada el deseo de comprar una marca cara solo para que vean que cuentas con un ingreso superior al común de la gente, piensa bien si es prescindible y cuáles son tus verdaderas capacidades financieras para costearlo.
- Evita formar parte de usar y tirar.
- Consume productos de consumo energético eficiente.
- Reutiliza productos que aún tengan vida útil.
- Reduce, reutiliza y recicla.
- Plantea si esa compra satisface tu necesidad.
- Compra contenido y no el embase.
- Muévete de forma sostenible, evitando tomar tu coche.
Como ha quedado claro, el consumo conspicuo no es nada bueno y solo hace que gastes de más, poniendo en riesgo tus finanzas personales.
Si eres de aquellos mexicanos que busca aparentar, considera nuestro consejo de cambiar tu postura a una más responsable y sostenible, en la cual no solo le ayudarás a tu bolsillo, también al planeta.
